Si tu vestido favorito te queda grande, es buena señal, pero para seguir usándolo, necesitas ajustarlo para que se ajuste a tu figura. Tienes dos opciones: llevarlo a un estudio o modelarlo tú misma. Este artículo explica cómo ajustar un vestido tú misma sin la ayuda de un especialista.
Cómo ajustar un vestido a la cintura
Si el vestido te queda bien en hombros y pecho, pero te queda un poco suelto en la cintura, puedes ajustarlo una talla. Hay varias maneras de hacerlo. Primero, puedes hacer una abertura en la parte delantera y coser botones o una cremallera; segundo, hacer pinzas; tercero, ajustar las costuras laterales. La elección del método dependerá del estilo del producto, la talla deseada, la tela y la habilidad del artesano.
¡Atención! Si necesitas reducir el vestido en 3 o más tallas, entonces los métodos descritos no funcionarán, tendrás que volver a cortarlo.
Vestido con botones
Para reducir el tamaño de una prenda con botones o cremallera, necesitas saber cómo ajustar los laterales de un vestido en casa. Si los botones están en un lateral, basta con coserlos 1 o 2 cm más, lo que hará que la prenda quede más estrecha.

Con la ayuda de una cremallera
La cremallera es otra opción genial para coser un vestido. Además, te permitirá actualizar el modelo, modificarlo y diversificarlo. Así que, el algoritmo de acciones:
- Primero debes probarte el vestido para saber cuántos centímetros debes ajustar;
- luego se corta por la mitad a lo largo de la espalda o se rasga a lo largo de la costura, si la hay;
- a cada lado, la tela se dobla tanto como sea necesario para reducir el volumen del vestido (si necesita quitar 5 cm en total, entonces el pliegue se realiza a 2,5 cm);
- Es importante seleccionar una cremallera de acuerdo al largo del corte y hilvanarla de un lado y luego del otro;
- El siguiente paso es probarse el vestido para ver si la talla es la correcta o si se necesitan más ajustes.
- Si todo está bien, se cose la cremallera con una máquina y se plancha.
Puedes utilizar pequeñas cremalleras ocultas que se integran en la costura y son prácticamente invisibles, o bien cremalleras decorativas de gran tamaño que se convertirán en un nuevo adorno para el vestido.

Reducción de mamas
Para hacer un vestido más estrecho en el pecho, el método con botones o cremallera no es muy adecuado. Es mejor usar pinzas, que pueden ser verticales y horizontales.
Las pinzas horizontales ayudan a reducir el tamaño de la prenda en el área del pecho, y las pinzas verticales pueden estrechar el vestido a lo largo de todo el largo del corpiño.
Primero, colóquese el producto y mida con tiza aproximadamente el área donde necesita ajustarlo. Después, haga una pinza con puntada de hilván. Antes de coserlo con firmeza, pruébese el producto.

Cambio de dardos
Las pinzas se ajustan solo si el vestido no sobresale del todo, sino solo en algunas zonas, por ejemplo, si queda demasiado grande en el pecho. En ese caso, es necesario ajustar las pinzas, es decir, ajustarlas un poco para que la prenda quede un poco más estrecha.
Método paso a paso para actualizar dardos:
- Tienes que ponerte el vestido, darte vueltas frente al espejo y determinar en qué lugares necesitas hacerlo más pequeño;
- Todo lo “sobrante” se fija con alfileres para marcar los lugares de ajuste;
- Luego se retira el artículo y se le da la vuelta;
- En función de los volúmenes deseados, es necesario hilvanar los pinzas, probarlos y coserlos con una puntada a máquina.
Para asegurarse de que las costuras no se vean, se deben planchar o vaporizar antes de usar la prenda.

Coser en la sisa
Si el vestido es ancho en las mangas y axilas, se recomienda ajustar la sisa para que la prenda se ajuste bien a la figura. Para estrechar el escote de la manga, primero hay que marcarlo. Luego, póngase la prenda y localice el punto del hombro y los pliegues de la axila. Para ello, sostenga una regla bajo la mano y marque con tiza las marcas delantera y trasera a lo largo de su línea superior. Es necesario medir la prenda en ropa interior y con hombreras, si se van a usar con el vestido.

Acortar la falda
Hay varias formas de acortar una falda, y dependerán del estilo del vestido:
- La línea A significa una expansión uniforme en la parte inferior. Para acortar este estilo, primero hay que ponerse la prenda y marcar el largo deseado de la falda. Desde la línea marcada, medir 2-3 centímetros hacia abajo para dejar margen y hilvanar o dibujar una línea con tiza. Debe medir desde el dobladillo hasta la cintura, ¡pero no al revés! Es importante medir la misma distancia en todos los lados y luego cortar. Antes de coser, se dobla ligeramente una nueva costura y se hilvana. Se recomienda coser después de una revisión.
- Una falda recta es mucho más fácil de acortar que otros modelos. Incluso un principiante puede hacerlo. Hay que doblar la prenda por las costuras y alisarla sobre una superficie dura y plana. Luego, de abajo a arriba (hasta el largo deseado), se hacen marcas a la derecha y a la izquierda con tiza. Después, se unen las líneas, dibujando una línea recta paralela a la parte inferior. Solo queda cortar el borde libre uniformemente, hacerle un dobladillo y coserlo. Es importante no olvidar planchar la costura para que no se note.
- Falda con pliegues. Antes de ajustar o acortar una prenda plisada, es necesario lavarla y dejarla colgada en una percha durante unos días. En casa, es más fácil acortarla desde arriba que desde abajo. Primero, se desgarra la falda del corpiño y el cinturón, eliminando los centímetros sobrantes, y luego se vuelve a coser el cinturón. En un taller, el proceso es diferente. Los pliegues se nivelan con un alisador especial, se recorta el largo, como un trapezoide o un drapeado, y luego se vuelven a plisar.

En el estudio
La necesidad de entregar un sárafan o vestido a un taller surge si no puedes hacerlo tú misma o no tienes máquina de coser. También es mejor confiar en un maestro si el vestido tiene un corte complejo o necesita ser modificado en 3, 4 o 5 tallas (en ese caso, solo un profesional puede rehacerlo).
También es importante recordar que existen ciertas particularidades al trabajar con telas elásticas. Pueden encogerse o deformarse al coserlas, y para no dañar el producto, es mejor confiar en la costurera.
Si el vestido tiene un patrón complejo y muchos elementos, será difícil reducir su talla por tu cuenta. En este caso, es mejor llevar el vestido de niña o mujer a un taller, donde costureras con experiencia lo harán bien. Evalúe la racionalidad de su elección; esta opción no siempre es económicamente viable. Tenga en cuenta que las diferentes telas utilizadas para coser vestidos tienen diferentes características de calidad, por ejemplo, el lino y el punto. Su elasticidad y forma son diferentes, lo cual debe tenerse en cuenta al modificar los productos terminados.
Encogimiento después del lavado
Este método solo es adecuado para prendas de lana natural. Al exponerse a altas temperaturas, tienden a encogerse. Si el vestido ha perdido su forma o se ha estirado, se recomienda remojarlo en agua a una temperatura de entre 50 y 80 grados. Cuanto más caliente esté, más se encogerá.

Es importante recordar que la prenda no se estira, por lo que es importante tener cuidado. Es mejor lavarla a mano para controlarla a tiempo.
Así, el proceso de cambiar la talla de tu vestido favorito después de leer este artículo no será tan difícil para ninguna chica o mujer.